Dermatología Clínica-Diagnóstica
Permítenos ayudarte en el manejo de las enfermedades y alteraciones de toda tu piel, pelo, anexos (glándulas sebáceas y sudoríparas), mucosas (oral y genital) y uñas para que, con el diagnóstico y tratamiento oportuno se eviten lesiones irreversibles.
La Venereología (enfermedades de transmisión sexual), la Tricología (Cabello) y la podología (alteraciones de los pies) son parte de nuestro conocimiento médico y práctica diaria.
Confía en nuestra experiencia Médica y sólida formación universitaria, para que con el conocimiento, respaldo científico, y en la experticia de las diferentes alternativas terapéuticas, te proveamos de las mejores opciones para tu bienestar.
Explorando tu Piel
El examen dermatológico requiere una muy cuidadosa exploración visual; el macro análisis de tu piel permite ubicar en la gran extensión, la especificidad de la afectación.
La palpación dermatológica proporciona información sobre la profundidad de la afección, la presencia o ausencia de calor y la firmeza de las lesiones, detectando la textura, la humedad, el desplazamiento y demás fluctuaciones que pueden ser invisibles al ojo y requieren entrenamiento y formación científica para determinarlas.
Soporte tecnológico diagnóstico
Los elementos diagnósticos que el dermatólogo maneja para la definición de tu pronóstico y tratamiento debe partir de la cuidadosa revisión clínica y de esto vendrá el pedido y análisis de las pruebas de laboratorio específicas y pertinentes a tu patología, complementadas con técnicas diagnósticas de alta especificidad como la histopatología con las tinciones adecuadas y/o la inmuno-histoquímica. Además contamos en nuestro Centro Dermatológico con los equipos para realizar exploración de Woods, tricoscopía de luz polarizada y video-dermatoscopía, que nos permitirán ofrecerle un acertado y bien documentado diagnóstico.
La Dermatoscopía de Epiluminiscencia Digital este es nuestro más sofisticado sistema de análisis microscópico que nos brinda una exhaustiva detección y seguimiento de las más mínimas lesiones imperceptibles por el ojo humano, excepcional en el diagnóstico precoz del cáncer de piel y el melanoma, pero aún más, nos permite registrar el mapeo de las lesiones del paciente para su seguimiento y control.
Especialmente útil en pacientes con gran cantidad de lunares y/o antecedentes de cáncer de piel. La observación continuada y el almacenamiento de las imágenes de la piel, puede evitar la extirpación innecesaria de nevus benignos que no hayan sufrido cambios en periodos de tiempo significativos.